Comenzamos en este número una nueva sección, que no tiene por objetivo ser un curso de computación, sino hacer conocer los secretos y brindar los consejos prácticos que no figuran en ningún curso, pero que son imprescindibles para solucionar los problemas que se presentan con más frecuencia.
Muchas veces nos cuesta entender como funciona algo que, como el mundo de los ordenadores e Internet, para nosotros no solo es nuevo sino que nos ha sido presentado por los medios de comunicación como algo casi "esotérico" y que funcionaría por reglas propias, diferentes de las que rigen nuestro mundo de comunes mortales.
Seguramente has escuchado hablar de la famosa "burbuja de Internet", y todas las complejas explicaciones que se han dado al respecto.
Pero, ¿sabes cuál fue una de sus causas principales?
Que muchos creyeron que, en el mundo de la informática, 1+1 ya no era 2... ¡¡ hasta que se dieron cuenta que allí también regían las reglas de siempre !!
El primer consejo es, entonces, no olvidarse que 1+1 es siempre 2, y que no puedes esperar que, por que tengas una PC delante, mágicamente ocurrirán cosas que tú sabes perfectamente que no pueden ocurrir.
Teniendo esta regla en mente, te daremos como ejemplo algo tan evidente que parecería innecesario mencionar, pero que sin embargo es una de los problemas más frecuentes en Internet (justamente por pensar que las cosas serían mágicamente diferentes allí).
La importancia de recordar tu dirección de email
Si alguien te pide la dirección de tu casa o tu oficina, la decisión de dar una dirección verdadera o una falsa es tuya y nadie te la puede discutir.
Pero también sabes que, si quieres que te envíen por correo algo que tú deseas, es fundamental que des bien tu dirección porque sino, no te llegará nunca (y, obviamente, no será responsabilidad del que hizo el envío, sino tuya).
Entonces, cuando ese es nuestro interés, tenemos mucho cuidado en:
1- Aprender bien cuál es la dirección de nuestra casa y/u oficina
2- Si no la recordamos, confirmar cuál es la correcta antes de escribirla o darla a conocer
3- Prestar atención para escribirla bien, sin errores y de manera que se entienda
4- Si tenemos un buzón o una casilla, revisarla y vaciarla.
Sabemos que si el correo se acumula en nuestro buzón, el cartero finalmente no tendría donde dejar nuestra correspondencia, o la misma se perderá o será sustraída.
5- Si hay un conserje que recibe la correspondencia, asegurarnos que nos la entregue o, al menos, saber dónde la pone para ir a buscarla cuando no nos la entrega.
Nuestra dirección de email no es nada más ni nada menos que la dirección de nuestra casa u oficina en Internet, y se rige exactamente por las mismas reglas básicas que acabamos de mencionar (te sorprenderías si supieras la cantidad de gente que lo olvida y, por ejemplo, ingresa una dirección de email falsa o incorrecta... y luego se queja porque nadie le escribe o no recibe lo que pidió).
TIP RAPIDO: Cómo ocultar archivos
Si compartes tu ordenador, puede que muchas veces necesites que otras personas que lo usan no puedan ver algunos de tus archivos. Hacerlo es fácil, siempre que la máquina no esté configurada para mostrar los archivos ocultos.
Para ello:
1- Abre el Explorador de Windows (Windows Explorer) desde el menú Inicio / Programas
2- Haz clic con el botón derecho sobre el archivo que deseas esconder y selecciona Propiedades (también puedes hacerlo directamente desde la carpeta en que se encuentre)
3- Marca el casillero "Oculto" (Hidden) y haz clic en Aceptar (OK)
Para verlo nuevamente, simplemente búscalo por su nombre mediante la función Buscar (Find), desde el menú Inicio
Lo único que debes tener en cuenta es que otras personas también podrán buscarlo de esta manera.
Por último, recuerda:
¡¡ Todos los expertos fueron novatos alguna vez !!
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